“Dejadme ir a la Casadel Padre” es el título del libro que narra los últimos días del Papa Juan Pablo II, según los recuerdos de su fiel secretario, el actual Arzobispo de Cracovia, Cardenal Stanislaw Dziwisz, y su médico de cabecera, Renato Buzzonetti.
A pocos días del primer aniversario del tránsito a la Casa del Padre del Siervo de Dios Juan Pablo II, salió a la venta la versión en italiano de “Dejadme ir a la Casa del Padre”. El libro cuenta, entre muchas memorias, las primeras palabras de Juan Pablo II al recuperar la conciencia luego del atentado del 13 de mayo de 1981, “dolor…sed…como Bachelet”, que según explicó Buzzonetti, eran justamente las secuelas propias de la complicada cirugía que se le practicó para salvarle la vida. Asimismo, hacían referencia al magistrado italiano Vittorio Bachelet, conocido del Papa por pertenecer al Pontificio Consejo para los Laicos, que poco tiempo atrás había sido asesinado por las Brigadas Rojas.
En el libro, Buzzonetti describe las diversas enfermedades que fueron presentándosele al fallecido Pontífice, hasta la septicemia que terminó causándole la muerte. Así también, recuerda como ya en 1991 había diagnosticado la presencia de los síntomas iniciales del Parkinson, reconocido por Joaquín Navarro-Valls en 1996, director dela Sala Stampa del Vaticano, como un “síndrome extrapiramidal”.
Buzzonetti recuerda a Juan Pablo II como un buen paciente, aunque en algunos aspectos era un tanto “impaciente”, pues siempre tras las operaciones, experimentaba la urgencia de reincorporarse al Vaticano, para continuar entregándose generosamente a su ministerio, a pesar de las recomendaciones propias de los médicos.